Había un estudiante que se durmió durante la clase de Matemáticas, se despertó con el sonido de la sirena, la cual anunciaba el cambio de clase, al ver dos problemas apuntados en la pizarra, los copió pensando que eran los ejercicios que debían de hacer. Lo estuvo intentando resolver durante toda la semana, pero era incapaz de resolver ninguno, pensaba que no sabía hacerlo fruto de haberse quedado dormido en clase y siguió intentandolo días tras día, hasta que llegó el siguiente Martes y tenían clase de matemáticas nuevamente. El chico se acercó al profesor y le dijo: "lo siento maestro, pero solo pude resolver uno de los dos problemas", el profesor atónito, no podía decir ni una sola palabra, hasta que el muchacho le dijo: "¿que pasa, porque esa cara de asombro? El profesor le dijo, has resuelto uno de los dos enigmas que hasta entonces se consideraban irresolubles.
Y lo hizo, porque nadie le dijo que era imposible, que no se podía hacer, puso las ganas, la fe y la perseverancia necesaria para llegar a resolverlo. En la vida, amigos y amigos pasa exactamente igual, cuando decides hacer algo y no escuchas a quien te dice que no se puede (porque te aseguro que lo vas a escuchar muchas veces), llegará el momento en que aquello se empiece a hacer realidad, empiezas a escalar, empiezas a cumplir metas, tu vida se vuelve mucho mejor y tu satisfacción personal es plena, debido a que como no hiciste caso a los negativos, a los perdedores, lograste aquello que tenías en mente, aquello que soñabas, aquello que deseabas día tras días.
Así que si vas a hacer algo, que sea al 100%, que sea con toda tu alma, porque solo así podrás hacerlo completamente realidad.
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